lunes, 15 de diciembre de 2008

De la ética de Lisbeth

¿Cuál es la ética de Lisbeth Salander? Desde luego, no es una ética cristiana en la que haya que renunciar a algo propio en función del prójimo. Lisbeth no es alguien que haya recibido mucho, ni material ni espiritual, de esa pobre madre, tan masoquista y tan fascinada por su amante y padre de sus hijas que no parecía que para ella existiera nadie más en el mundo. Bueno, quizá también existía para ella su otra hija, Camila; pero no Lisbeth, a la que terminará por confundir con su hermana, tan escaso es el interés que tiene para ella esa pequeñaja casi raquítica y tan poco cariñosa en los gestos, con la que ella no puede identificarse.
Quizá podamos decir que la ética de Lisbeth es la de los y las supervivientes; ella tiene que seguir adelante porque tiene el íntimo saber de que nadie va a sacarla del agujero si cae en él. Y si tiene dos brazos y dos piernas, seguirá adelante con ellos; y si se pone a cojear, seguirá cojeando, pero seguirá mientras el cuerpo aguante, y cuando éste no aguante... pues eso no lo podemos saber porque a Stieg Larsson dejó de aguantarle el suyo. Otro día nos dedicaremos al autor.
Me hizo mucha ilusión encontrar mensajes de un tal Juan que propone seguir discutiendo sobre el tema. Estupendo; en la medida que mi falta de destreza con los blogs me lo permita, subiré tus comentarios. Gracias por participar.